Por: Ing. Hernán Hernández
Un hogar con secuencias de iluminación de buenos días, buenas noches, romance o entretenimiento; o al que se puede acceder y controlar de manera segura desde cualquier parte del mundo, no es cosa del futuro, actualmente es posible con la integración de sistemas.
Integrar significa “agregar una cosa o elemento para completar un todo”, en esta definición nos apoyaremos para dar a entender la necesidad de este concepto en un sistema automatizado. Los componentes de una solución de control, sean éstos tangibles (hardware) o intangibles (software), son parte de un todo, por lo que están estrechamente vinculados unos con otros para lograr un fin común.
Entre los más importantes avances tecnológicos en la industria manufacturera de productos para la automatización, está el desarrollo de dispositivos y sistemas capaces de complementarse para formar realmente un todo.
Aparatos llamados inteligentes han impulsado la masificación de las redes de comunicación. Por ejemplo, la informatización en la gestión de los procesos industriales ha permitido el mejor control de plantas industriales y como resultados directos beneficios en la productividad, que sin las tecnologías actuales nunca hubiesen sido posibles.
Los principales elementos en la ejecución de la integración se le conocen como interfaces de integración que se utilizan cuando los dispositivos de sistemas diversos no pueden utilizar el mismo cableado o no tienen el mismo lenguaje de comunicación.
Esto llevado a los sistemas en edificios no solamente se orientan a control de iluminación sino también a monitoreo, control de accesos, seguridad, riego, entre otros.
En esta edición no comentaremos sobre los tipos de controles sino que nos abocaremos a describir al componente que permite esta integración de los sistemas, siendo diversos pero convergiendo en cuanto a funcionamiento y principio de operación.
PROYECCIÓN EN VIVIENDA
El control residencial está ligado a la capacidad de controlar un equipo, un sistema, una puerta o una luz a través de una interfaz. La interfaz de control más común es el control remoto o mando a distancia; permite controlar un televisor, un reproductor de Blu-ray, incluso las luces. De acuerdo a los equipos y sistemas que se tengan en casa se tendrán diferentes formas de controlarlo.
Si en una casa existieran 20 controles y de ellos 7 estuvieran en la sala o cuarto de televisión, donde hay una pantalla, un reproductor de Blu-ray, un decodificador de TV, un sistema de TV por internet (como el Apple TV), un receiver AV, cortinas y luces; cada uno con un control; se necesitaría para ver una película bajar las cortinas, apagar las luces, encender la pantalla y seleccionar la entrada HDMI, encender el Blu-ray, y finalmente reproducir la película.
La integración de sistemas permite agregar pantallas sensibles al tacto, controles de reconocimiento de voz, sistemas de audio, seguridad, acceso, entre otros; reduciendo el número de controles remotos.
Obviamente sería más sencillo si existiera un sistema que controlara el resto de los sistemas de la casa; pues bien a este sistema se le conoce como tal: sistema de control y nos permite integrar diversos sistemas en uno solo. Un ejemplo del sistema integrable para un cuarto de TV se muestra en la imagen 1.
La imagen 1 es sólo un ejemplo de cómo la integración residencial nos permite conjuntar en un sistema de control los servicios que tiene una casa. Cuando un sistema como la iluminación puede ser gobernado por un sistema de control, hablamos de que las luces se pueden integrar. Si el sistema de riego del jardín no puede ser gobernado por el sistema de control, entonces no se puede integrar. Si el objetivo es que una vivienda pueda integrarse en su totalidad es importante instalar sistemas que sean controlables, ya sea a través de comandos infrarrojos (como lo hacen los controles remotos), puertos de control para protocolos de comunicación como RS232 o TCP/IP, o bien mediante relevadores.
Las ventajas son claras, controlar toda la casa desde una interfaz. Obviamente que no sólo habría un control para todo, pues sería un problema andarlo buscando por toda la casa o andar llevándolo siempre; se deben instalar varios controles que permitan controlar todos los sistemas.
Los sistemas más completos de control e integración nos permiten programar estos controles en equipos como iPhone, iPod, o iPad con iOS y también en celulares y tabletas electrónicas con sistema operativo Android.
Sin embargo, se está a expensas de alguna falla tecnológica, por eso es importante tener los controles de cada sistema guardados para que en alguna contingencia, como la caída de un rayo, los sistemas se puedan controlar.
Existen muchos equipos que permiten montar un sistema de control, por lo general se componen de interfaces de control como lo son botoneras, pantallas táctiles y aplicaciones para iOS y Android; y un procesador, que es el cerebro del sistema y controla el resto de los sistemas. Cada uno de los fabricantes de sistemas de control ofrecen otros equipos auxiliares e incluso sistemas de audio, video e iluminación compatibles con su procesador.
Principales fabricantes de sistemas
Proveedores hay muchos, entre los más especializados y populares encontramos a Leviton, Crestron, Control4, Lutron y Bticino, y como todo cada uno de ellos tienen ventajas y desventajas. Asimismo, como parte de sus políticas rara vez son compatibles entre marcas; pero tienen la capacidad de integrar desde los sistemas de una habitación hasta un edificio completo de manera muy estable.
Antes de iniciar un trabajo de integración, te recomendamos capacitarte con una marca en específico para ir tomando experiencia y después explorar las ventajas que pueden ofrecerte las demás.
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