Por: Ing. Hernán Hernández
Los paneles LED en los últimos años han sido de los productos más demandados. Son el claro ejemplo de cómo una luminaria LED remplaza óptimamente a una luminaria convencional o en este caso a los tubos fluorescentes.
Muchos proveedores de este tipo de paneles, que ofertan sus productos en páginas de internet, no presentan la información técnica adecuada a los compradores y esto en cierto momento afecta al mercado en general, por lo que siempre es importante realizar las compras en tiendas formalmente establecidas y que tengan en su oferta a marcas reconocidas.
Las compras en línea han ido aumentando debido a la facilidad con que se realizan, e incluso los costos en ocasiones son más bajos y dan la oportunidad de pagar de diferentes formas, ya sea por tarjeta o mediante depósitos bancarios. Ir en contra de estos nuevos modelos de negocio sería un grave error, pero debes ser cuidadoso y no comprar artículos que al final no cumplan con la operación que ofrecen o esperabas de ellos; la información será la herramienta más poderosa para invertir correctamente nuestro dinero.
Cabe hacer mención que las luminarias deben cumplir con la NOM-030-ENER-2012 “Eficacia luminosa de lámparas de diodos emisores de luz (LED) integradas para iluminación general. Límites y métodos de prueba”; y en la aplicación, en el caso de luz indirecta, es importante considerar el cumplimiento de la norma NOM-007-ENER-2014 “Eficiencia energética para sistemas de alumbrado en edificios no residenciales”.
Bien, regresando al tema, cuando un fabricante decide adquirir un LED para montarlo en su luminaria, consulta la hoja de datos donde el proveedor coloca las características lumínicas respecto a las eléctricas, por ejemplo consumo: 350 mA 100 lm. Sin embargo, esta información es en condición ideal, dado que cuando se instala en el panel sufre modificaciones, sobre todo en el flujo lumínico que es afectado directamente por el diseño del sistema óptico.
El sistema óptico es una serie de elementos por el cual la luminaria define la distribución del flujo lumínico que le proveen los LED: lentes, difusores, rejillas, fibra óptica, reflectores metálicos, cristales de todas las texturas, colores y todas las características de trasmisión que nos podamos imaginar. Hay que tomar en cuenta el fenómeno de refracción, que es un cambio de dirección que experimenta la luz al cambiar de medio de propagación. Está determinado por un valor que resulta de la relación entre la velocidad de la luz en el vacío y la velocidad de la luz en otro medio.
Además de cambiar la dirección de la luz, también ocasiona pérdidas, ya que parte del flujo se desviará de la trayectoria y otra parte se reflejará en la superficie del material en el que la luz penetra. Todo esto es para explicar que según el diseño de la óptica del panel, la eficiencia será mayor o menor; debido a esto los paneles se dividen en dos tipos: iluminación directa e indirecta.
ILUMINACIÓN DIRECTA
Los paneles de iluminación directa son prácticamente los de primera generación y su característica de construcción es que los LED están orientados a las superficies a iluminar.
Su ángulo suele estar determinado por unas pequeñas guías de material reflectante, y las pantallas que poseen tienen una función de control de deslumbramiento más que de direccionamiento de flujo luminoso. Son muy eficientes, pues la luz prácticamente no cambia de dirección, y pueden llegar sin problema a los 105 lúmenes por watt consumido.
La iluminación indirecta está siendo utilizada no solamente en paneles sino también en lámparas circulares, pues su fabricación es sencilla y no se notan puntos brillantes.
ILUMINACIÓN INDIRECTA
Los de iluminación indirecta están orientados de manera horizontal, por lo que iluminan a una lámina multicapa de un material sintético que tiene la propiedad de cambiar muy bruscamente el ángulo de la luz, utilizando compuestos con índices de refracción adecuados o materiales cristalinos con fibras ópticas en transversal que redirigen la luz. Esta lámina está precedida por un material blanco que refleje parte de la luz de los LED que pueda ir hacia arriba; por ello este tipo de paneles tienen una mayor pérdida que los de iluminación directa llegando a los 80 lúmenes por watt, sin embargo resultan más estéticos, su emisión de luz es más uniforme y ocasionan menos deslumbramiento.
Una de las grandes ventajas de los paneles es que son adecuados para todo tipo de interiores en residencias, oficinas o inmuebles comerciales.
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